Esta es la frase repetida tanto por nuestro presidente del
Consejo de Administración, a la sazón Alcalde del municipio, como por nuestro
Director Gerente, los trabajadores de la
EMS están muy contentos con la organización de la empresa y
con sus puestos de trabajo, siempre recordándonos el privilegio que es tener un
trabajo en estos tiempos que corren.
Pues estos tiempos,
que lamentablemente gracias al partido político de ambos y demás aniquiladores
del estado social y de los derechos de los trabajadores, son los que corren
cuesta abajo, y centrándonos en nuestra empresa, no nos parece que la mayoría
esté de acuerdo con esa afirmación de arcadia feliz donde las decisiones de
nuestros dirigentes son las idóneas para sacar esto adelante.
Somos los primeros, los trabajadores, los que hemos hecho un
esfuerzo para aliviar los disparates de unos cuantos ultracentristas que
pensaban que privatizando y recortando servicios esto iba a ser el paraíso
(para algunos sí), ahora la EMS como empresa pública tiene
que arrimar esfuerzos y llevar más servicios con el mismo personal, con la
excusa de la falta de dinero.
Pero es ahí donde saltan las costuras, no sabemos si con la
intención de deteriorar este servicio público o de exprimir hasta el hartazgo a
muchos trabajadores. Los concejales se subieron el sueldo (lo justo según
ellos), el número de asesores adecuado (para una ciudad, contando el nuevo Tres
Cantos, como New York), el dinero perdido-en la lumínica idea de gestión
indirecta con externalización y precios dentro de las tasas municipales con
varias modalidades de tarjetas para los usuarios en un ejemplo de optimización
de los recursos públicos del C.D. Islas-ya aparecerá.
Nos quitan la paga extra, contra su criterio, les obligan
desde más arriba, pero la voluntad es que la recuperemos, ¿cuándo?, ¿cómo?,
vaya, es que queréis saber demasiado, dicen los exégetas; ¿alguna alternativa?,
sí, vamos a trabajar más por menos, contestan a coro los gestores del nuevo
plan de desarrollo.Realmente es trabajar menos por menos, menos limpieza y mantenimiento en las instalaciones, menos polideportivos atendidos, menos servicios para los usuarios...
El C.D. Islas lo vuelve a llevar la EMS , un pequeño fallo en su
idea de libérrima gestión, pero hasta
Enero no hay canon ( y ya veremos cual), mientras sacan a unas limpiadoras de
los colegios, a otras de otros sitios y asunto arreglado(el colegio sucio o las
trabajadoras machacadas, Wert se inclinaría por la segunda opción), para los
puestos de Conservación promoción
digital, desde la
Coordinación se decide, a ver, a ver, un cambio por aquí,
unas subidas de categoría por allá, unas horitas más por acullá, el proceso
legal para las vacantes se lo pasan por el arco de la vergüenza, y lo peor es
que encima no ahorran costes, o sí, claro, con las trabajadoras de limpieza que
tienen más trabajo pero el mismo-o menos- personal. Tenemos una empresa pública
para que nos quiten la paga, pero para cumplir la legalidad parece una empresa
de Gao Ping.
Pero como hay que seguir ahorrando costes, se sube la
categoría a unas cuantas personas (sin promoción ni nada parecido), entre ellas
una representante sindical, que no va a decir que no a la mano que le da de
comer. La vergüenza de nuevo desaparece, a ver cuanto pillo, cojo los cartones
y ahí os quedáis.
Esto es lo que tenemos (y muchas más cosas), no sólo está en
nuestra mano cambiarlo, pero podemos aportar entre todos algún granito, o no
sabemos como podrán dejar estos maravillosos dirigentes nuestra empresa y todos
los servicios públicos. Su objetivo, o acabar con la EMS , ya han empezado, recordaros
que siguen con la idea de privatizar el SAD, a pesar de no poder demostrar (sólo
ideológicamente), y eso que las comisiones al respecto las hacen ellos solos,
que es un buen proyecto para la ciudadanía (el SAD funciona adecuadamente, son
excelentes profesionales las trabajadoras, el departamento está saneado económicamente
y los usuarios están encantados del servicio) , o estructurar la EMS como una empresa sin
criterios profesionales ni legales, donde sólo tendrán cabida los perritos
falderos que observen obediencia a las líneas maestras de nuestros líderes de gestión pijo-liberal.
1 comentarios:
El día que todos estos cuatreros-estafadores, trajeados ladrones de lo público, de lo nuestro, de lo de todos… el día digo, que todos estos terminen en la cárcel -porque es lo justo y será Ley-, ese maravilloso día, veremos a sus esbirros huérfanos, perdidos, llorosos y con cara de no entender. Tendrá que salir un voluntario que les explique que sí, que ellos fueron un tiempo los elegidos por ser los parias más ignorantes, los más manipulables…los que tienen tan poca sensibilidad que ni sienten cómo les deforman el alma, cómo les chupan la sangre sin considerarles siquiera seres humanos. Habrá que recordarles cómo les cegaron con la ignorancia y el miedo para enfrentarlos a sus semejantes y cómo ellos aceptaron por la pasta, por esos insignificantes trozos de papel que les dan el poder sobre los demás hombres. Seguramente algunos tomarán conciencia del vacío instalado en su cabeza en el lugar donde tendrían que habitar sus principios morales. Posiblemente para otros sea ya tarde salir del entumecimiento mental y se dediquen a hacer visitas a la prisión donde sus apolillados benefactores delincuentes les hablen de tiempos mejores, cuando hasta estaban bien vistos y mejor pagados. Mientras llega su día, algunos, sí, estamos muy contentos de no ser como ellos, de no ser unos Judas, como la representante sindical Camino T., que se vendió obscenamente a su inmoral patronal por un puñado de monedas; de no ser como los integrantes de la gerencia de esta empresa, que cada vez que abren la boca demuestran su ignorancia, su vulgaridad y su cinismo; en fin, de no haber sido adiestrados por estos déspotas marrulleros del siglo XXI.
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